Una muestra recoge en Villa del Río fotos y lemas sobre lacras sociales
RAFAEL CASTRO AVILA 22/10/2011 Diario Cordoba
La Casa de las Cadenas de Villa del Río acoge hasta el día 31 de octubre una interesante exposición del diseñador gráfico y fotógrafo artístico Juan Francisco Muñoz Lozano, en la que recoge fotografías y eslóganes contra la violencia de género, el desamparo, la igualdad, la lacra social, el sida y las drogas. En la presentación, Juan Francisco Muñoz estuvo arropado por un nutrido número de mujeres de su pueblo y dijo que esta idea le surgió tras oír varias historias de personas de su comunidad de vecinos "que lo estaban pasando realmente mal, pero por ellos no podía hacer nada de forma directa". En ese momento, Muñoz sintió la necesidad de colaborar de alguna manera con una minoría que, a su juicio, lo necesita.
La exposición cuenta con representaciones fotográficas de siete temas cruciales de la sociedad actual citados anteriormente, y más que una exposición de cuadros y fotografías se puede aplicar a una muestra de los sentidos, los sentimientos y la representación mediante el arte de una persona comprometida con la sociedad que le rodea. Todo ello echando mano del arte. El alcalde, Bartolomé Ramírez, dijo que "Juan Francisco es un ejemplo más del fuerte capital humano que tiene nuestro pueblo a nivel artístico, por lo que recomiendo visitar la muestra por el mensaje tan profundo que transmite". Las pretensiones de este joven artista es que todos los visitantes se paren a pensar por un momento sobre el mundo que nos rodea. Asegura que la velocidad de vértigo a la que nos movemos hace que los ciudadanos no se paren a escuchar a sus vecinos, a analizar muchas de sus situaciones y atenderles, motivándolos y guiándolos por el camino correcto. Con esta exposición se consigue que el público sienta esa sensación de marginación, oscuridad, necesidad y soledad en primera persona y que afloren los sentimientos, emociones e impresiones de lo que le rodea, "todo ello mediante agudas imágenes que antes no se había parado a ver y escuchar", relata Muñoz.
La planta baja de la Casa de las Cadenas alberga esta muestra, que trata de sensibilizar a la sociedad de que realmente existe alrededor nuestra un colectivo marginado. Pero la enseñanza que se extrae además es que nadie es perfecto, que se olvide la prepotencia adquirida en la última década con la bonanza económica, que ha hecho que muchas personas piensen más en la economía que en las relaciones personales. Pero además, las imágenes recrean la importancia de caer y volver a levantarse, "de no distinguir entre el color de la piel, ya que en el interior de cada ser humano hay un corazón que late, que sufre, que ríe y que llora", comenta Juan Francisco Muñoz, un joven que trata por todos los medios de "no reírle la gracia a la hipocresía". La muestra anima a los visitantes a asumir como es cada uno, sin diferencia de sexo o condición social, algo que realmente conmueve.