Algunos tienen la cara suficiente como para coger lo que no es suyo, destrozarlo y utilizarlo para hacer una barbacoa. Este es el caso de la valla que hay en el recinto de San Isidro. Recientemente el Concejal de Medio Ambiente ha denunciado públicamente este hecho. Pero mientras desde el Ayuntamiento se denuncia el mal uso que se hace del mobiliario público por parte de algunos desaprensivos , otros ciudadanos se pregunta porqué el Jardín del Lirio lleva abandonado en limpieza ya varios meses. ¡Curiosidades de nuestro pueblo!
(A.H.)