La huelga abre otra guerra de cifras entre sindicatos y patronal
Córdoba http://www.eldiadecordoba.com
Los empresarios reiteran su rechazo a un convenio regional para los empleados
13/06/2007
Pablo Cruz. La primera jornada de huelga en el sector de la construcción finalizó ayer en Córdoba con la habitual guerra de cifras entre patronal y sindicatos en cuanto al apoyo del paro de actividad. Los representantes laborales calificaron de “éxito” este primer día debido al, según su punto de vista, amplio respaldo a la convocatoria de paro. Desde UGT y CCOO se afirmó que el índice de seguimiento de la huelga durante toda la jornada en Córdoba fue del 95 por ciento, con un considerable apoyo en todas las localidades de la provincia, a las que se desplazaron los piquetes informativos desde la primera hora de la mañana.
Una visión radicalmente en contra es la que mantienen los empresarios. El secretario general de la Asociación Provincial de Constructores, Francisco Carmona, apuntó que “tan sólo el 20 por ciento de los empleados han secundado la huelga, según nuestras referencias”. Este dirigente de la patronal indicó que la situación ha sido distinta en la capital en relación a la provincia. En el caso de la ciudad, según explicó Carmona, la incidencia fue mayor, “sobre todo en aquellas zonas donde se acumula un número considerable de obras”. Una realidad diferente, a su juicio, es la que se vivió en el resto de la provincia, ya que allí “el seguimiento de la huelga ha sido muy escaso”.
Este representante empresarial también diferenció el respaldo al paro de actividad en función del momento de la jornada. De esta manera, reconoció que a primera hora del día hubo más asalariados que no quisieron trabajar, algo que achacó a la presencia de los piquetes. “Sin embargo, una vez que éstos se marcharon, los empleados se incorporaron sin ningún problema a su puesto”, aseveró Carmona.
Independientemente de estas diferencias de valoración entre ambas partes interesadas, las cifras oficiales dejaron claro un seguimiento muy desigual de esta convocatoria, que continúa hoy, según los municipios. Fuentes de la Subdelegación del Gobierno, a partir de datos recogidos por los agentes de la Guardia Civil, señalaron que “se han tenido constancia de cifras muy distintas en cada una de las poblaciones de la provincia”.
El Instituto Armado indicó que las localidades en las que se registró una paralización total de las obras fueron Posadas, Villa del Río, Peñarroya-Pueblonuevo, La Victoria, La Carlota, Montilla, Zuheros y Doña Mencía. En otros municipios, como es el caso de Baena, un 90 por ciento de los trabajadores secundaron la huelga. Una realidad muy distinta se vivió, según la Subdelegación, en otras poblaciones donde el seguimiento fue menor. Así ocurrió en La Rambla, donde el apoyo fue nulo, o Carcabuey, con un 20 por ciento, Nueva Carteya (30 por ciento), Luque (40 por ciento) o Espejo (50 por ciento).
El motivo central por el que se ha convocado este paro es el desacuerdo existente en torno a la jornada intensiva durante el verano. Los sindicatos abogan que se amplíe este horario hasta llegar a los tres meses, frente a los 49 días establecidos en la actualidad. Otra reivindicación es la homogeneización de los salarios en Andalucía.
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Los empresarios reiteran su rechazo a un convenio regional para los empleados
13/06/2007
Pablo Cruz. La primera jornada de huelga en el sector de la construcción finalizó ayer en Córdoba con la habitual guerra de cifras entre patronal y sindicatos en cuanto al apoyo del paro de actividad. Los representantes laborales calificaron de “éxito” este primer día debido al, según su punto de vista, amplio respaldo a la convocatoria de paro. Desde UGT y CCOO se afirmó que el índice de seguimiento de la huelga durante toda la jornada en Córdoba fue del 95 por ciento, con un considerable apoyo en todas las localidades de la provincia, a las que se desplazaron los piquetes informativos desde la primera hora de la mañana.
Una visión radicalmente en contra es la que mantienen los empresarios. El secretario general de la Asociación Provincial de Constructores, Francisco Carmona, apuntó que “tan sólo el 20 por ciento de los empleados han secundado la huelga, según nuestras referencias”. Este dirigente de la patronal indicó que la situación ha sido distinta en la capital en relación a la provincia. En el caso de la ciudad, según explicó Carmona, la incidencia fue mayor, “sobre todo en aquellas zonas donde se acumula un número considerable de obras”. Una realidad diferente, a su juicio, es la que se vivió en el resto de la provincia, ya que allí “el seguimiento de la huelga ha sido muy escaso”.
Este representante empresarial también diferenció el respaldo al paro de actividad en función del momento de la jornada. De esta manera, reconoció que a primera hora del día hubo más asalariados que no quisieron trabajar, algo que achacó a la presencia de los piquetes. “Sin embargo, una vez que éstos se marcharon, los empleados se incorporaron sin ningún problema a su puesto”, aseveró Carmona.
Independientemente de estas diferencias de valoración entre ambas partes interesadas, las cifras oficiales dejaron claro un seguimiento muy desigual de esta convocatoria, que continúa hoy, según los municipios. Fuentes de la Subdelegación del Gobierno, a partir de datos recogidos por los agentes de la Guardia Civil, señalaron que “se han tenido constancia de cifras muy distintas en cada una de las poblaciones de la provincia”.
El Instituto Armado indicó que las localidades en las que se registró una paralización total de las obras fueron Posadas, Villa del Río, Peñarroya-Pueblonuevo, La Victoria, La Carlota, Montilla, Zuheros y Doña Mencía. En otros municipios, como es el caso de Baena, un 90 por ciento de los trabajadores secundaron la huelga. Una realidad muy distinta se vivió, según la Subdelegación, en otras poblaciones donde el seguimiento fue menor. Así ocurrió en La Rambla, donde el apoyo fue nulo, o Carcabuey, con un 20 por ciento, Nueva Carteya (30 por ciento), Luque (40 por ciento) o Espejo (50 por ciento).
El motivo central por el que se ha convocado este paro es el desacuerdo existente en torno a la jornada intensiva durante el verano. Los sindicatos abogan que se amplíe este horario hasta llegar a los tres meses, frente a los 49 días establecidos en la actualidad. Otra reivindicación es la homogeneización de los salarios en Andalucía.
