La Junta prepara el 'plan general' del área metropolitana de Córdoba
La Consejería de Ordenación del Territorio saca a concurso antes de fin de año la redacción del plan subregional de la capital y de los municipios que la rodean
Rafael Ruiz | Actualizado 20.11.2008 - 01:00
La Consejería de Ordenación del Territorio tiene ultimados los pliegos de condiciones para contratar antes de fin de año a la empresa que redacte el plan subregional del área metropolitana de Córdoba, el primer documento ejecutivo amparado por la legislación que tendrá que establecer en qué consiste el entorno metropolitano de la capital y cuáles deben ser las políticas públicas que se desarrollen en su entorno. La importancia de este documento de planificación es clave puesto que, en la práctica, supone aprobar un plan general de planes generales. Su contenido vinculará a los distintos municipios comprendidos en el ámbito, que tendrían que adaptar sus respectivas planificaciones en el caso de que sus planes entraran en contradicción con lo aprobado por la Junta, que ha de someter su aprobación a la audiencia de los distintos gobiernos municipales. En estos momentos, la Junta se halla en proceso de redacción del plan subregional de la zona Sur de la provincia, para lo que se está reuniendo con todos y cada uno de los 31 alcaldes afectados.
El plan subregional del área metropolitana, explica el delegado de Ordenación del Territorio, Francisco García, fijará incluso cuáles son los municipios afectados. Inicialmente, el POTA decidió que el plan afectara a Córdoba, Villaharta, Villaviciosa, Villafranca, Obejo, La Carlota, Guadalcázar y Almodóvar. Posteriormente, otros municipios han reclamado estar dentro de esta iniciativa como Fernán Núñez, Villa del Río o Pedro Abad.
El plan subregional entra a regular aspectos que, hasta el momento, formaban parte de la política local. Así, entre otras cuestiones, está legitimado para buscar oportunidades de suelos que se puedan dedicar a polígonos industriales de escala común a varios municipios. En materia de vivienda, sólo este documento tiene la oportunidad de romper los límites de crecimientos establecidos por la Junta (no se aprueban incrementos del 40% de suelo urbanizable ni por encima del 30% de población) así como explorar nuevas necesidades no previstas por los ayuntamientos. Además, el documento tiene que fijar todos los equipamientos actuales y futuros que den respuesta a las necesidades de políticas públicas tanto de la Junta (centros médicos, colegios o transportes) como de otras instituciones con competencias en la materia, como la Diputación Provincial.
Algunos de los planes subregionales que ha tramitado hasta ahora la Junta, como el que se elaboró para la Costa del Sol, fueron tremendamente polémicos por la negativa de muchos alcaldes a ceder poder o a que se estableciesen límites. En el caso de Córdoba, el documento pretende dar respuesta a los crecimientos de municipios, como La Carlota o Guadalcázar, que han sufrido un enorme incremento de población a costa de las personas que se mudaban de la capital. Dichos crecimientos, imputables también al suelo industrial, se han llevado a cabo bajo un cierto descontrol urbanístico, lo que ha favorecido crecimientos descontrolados o fenómenos de construcción irregular o sin las dotaciones adecuadas.
