El año 2010 es el que refleja las peores sensaciones para el sector desde que comenzó la crisis pues por primera vez el índice de confianza se sitúa por debajo de 100 y la mayoría cree que irá a peor
A. Calero | Actualizado 03.07.2010 - 01:00
El sector del comercio está viviendo su año más complicado desde que se inició la crisis económica. Al menos así lo refleja el Índice de Confianza de los minoristas de Córdoba que elabora la Cámara de Comercio y que arroja en este primer semestre los peores resultados, según las respuestas que se han obtenido en las encuestas realizada entre más de 700 empresarios. De este trabajo de campo se ha extraído la conclusión de que nueve de cada diez comercios aspira el año que viene simplemente a mantenerse en el mercado o, incluso, cerrar o traspasar el negocio. En concreto, el 83% de los consultados se daría por satisfecho sólo con subsistir hasta el próximo ejercicio, pero hay un 10% que apuesta por el cese de la actividad en caso de continuar esta coyuntura. En este apartado sólo hay un 6,2% que piensa en realizar inversiones para mejorar sus resultados. Si se analizan los subsectores, el de vehículos y accesorios es el más pesimista debido al incremento del IVA y a la finalización de las ayudas del Plan 2000E. Esta última medida ha levantado al sector en los últimos meses que, sin embargo, espera ahora un parón dadas las nuevas circunstancias. El del mueble es otro apartado que prevé un mayor número de traspasos o cierres. Las industrias de este grupo, que se concentran en localidades como Lucena o Villa del Río, fueron las primeras en sufrir las consecuencias de la recesión debido al parón inmobiliario y por eso son las más pesimistas con su futuro.
El comercio, por tanto, considera que todavía no ha tocado fondo, como se demuestra también con otro dato: el de la confianza en al actividad de los minoristas. Esta índice se sitúa por primera vez por debajo de 100 (en el 96,1; lejos del 114,5 que se registraba en 2007). El presidente de la Cámara de Comercio, Ignacio Fernández de Mesa, corroboró que la sensación que tiene el sector es la de estar atravesando por su peor momento, y recordó el dato de los impagados en el comercio, que ha alcanzado su cota más alta. Uno de los técnicos del Servicio de Estudios del órgano cameral, Rafael Reyes, dijo también que son "los peores resultados" que se han extraído después de tres años elaborando esta encuesta.
Los números del Índice de Confianza son totalmente desalentadores se analice el apartado que se analice. Más de la mitad de los comerciantes cree que la marcha de su establecimiento irá regular o mal durante este año, sobre todo los que se dedican a la venta de electrodomésticos, muebles o vehículos. Además, el 67% de los negocios han sufrido una caída en sus ventas, especialmente los relacionados con el textil, calzado y complementos , que son los que más han reducido su facturación. El 30% de las empresas de la provincia ha tenido que reducir su plantilla y ocho de cada diez considera que este año acabará igual o peor que el anterior.
Se trata de una secuencia de datos tras los que se esconden la realidad del sector. Fernández de Mesa aseguró que desde la Cámara "esperamos que los datos no resulten tan negativos como muestran las previsiones", aunque reconoció que la situación es "muy preocupante" motivada por la caída espectacular que ha sufrido la demanda.