sábado, 22 de agosto de 2020

Fallece a los 94 años Francisco Alcaraz, el último indaliano

Sus cenizas descansarán en Almería por deseo de sus hijos

Francisco Alcaraz (a la izquierda), María Vazquez, López Díaz y Mª Dolores Durán. LA VOZ

MARÍA DOLORES DURÁN 14:54 • 22 AGO. 2020

El almeriense Francisco Alcaraz, el último representante del Movimiento Indaliano, ha fallecido este viernes en Madrid a los 94 años de edad. Por deseo expreso de sus hijos, sus cenizas descansarán en Almería.

Alcaraz nace el 5 de febrero de 1926 en la calle Vergel, 13, de Almería. Al terminar la Guerra Civil, con 13 años, regresa a la Escuela de Artes y coincide con todos los otros indalianos. Compaginaba el trabajo por las mañanas como mozo y repartidor en el negocio de José María Molina en el almacén de distribución de fármacos con su vocación artística, asistiendo por las tardes a las clases de pintura que impartía José Tola.

A los 16 años ingresa en el taller de escultura de Jesús de Perceval. En 1945 Perceval congrega a artistas y escritores, entre ellos Celia Viñas, Fernando Ochotorena, Juan Cuadrado o Luis Úbeda. Se reunían en la Granja Balear. Jesús de Perceval con el apoyo de su amigo Juan Aparicio, director nacional de prensa, y Rodrigo Vivas Tellez, ex gobernador civil, consigue que se organicen el Museo Nacional de Arte Moderno de Madrid una exposición de artistas almerienses.


El primer congreso indaliano se celebra en 15 de mayo de 1947 en Pechina. El 28 de junio del 47 marchan a Madrid y paran en el Hotel Americano de la Puerta del Sol.
Con la ayuda de una beca que le concede en 1947 la Diputación de Almería deciden no regresar a Almería y quedarse en Madrid.

En noviembre del 48 inaugura en el salón de estampas del Museo Nacional de Arte Moderno una exposición con 27 lienzos y 5 dibujos para su presentación en dicha ciudad. La Academia Breve de Crítica de Arte impulsada por Eugenio d'Ors  para promocionar y difundir el Arte Moderno presenta el 18 de diciembre del 48 el Sexto Salón de los Once, en el Museo Nacional de Arte Moderno.


En 1948 obtiene una beca del Ministerio de Trabajo y marcha a París. Entra a trabajar en el taller del maestro granadino José María Torres García. restaurador y experto en arte antiguo, haciendo labores de restauración y talla de marcos. Alterna los trabajos de restauración con la pintura. En 1950 obtiene una beca del gobierno francés. Se aloja en el Colegio de España en la Ciudad Universitaria. En 1951 participa la primera Bienal Hispanoamericana de Arte. La actitud de oposición a la convocatoria de la primera bienal se expresa en un manifiesto firmado por artistas, intelectuales españoles exiliados en París encabezado por Picasso.

Su mujer y sus dos hijos, Paco y Mari, van a reunirse con él en Paris. Recibe el premio de la embajada española en Francia, son estos años París años de una intensa actividad artística. Exhibe su obra la II Bienal Hispanoamericana de arte que se celebra en la ciudad de La Habana en 1954.

Alcaraz se sentía atraído por la modernidad, por la nueva corriente del arte europeo, y al mismo tiempo alejado de la pintura localista o costumbrista.

Walter Chrysler. propietario de Chrysler Building en Nueva York, adquiere 20 de sus mejores  obras en 1954.

En 1955 Alcaraz participa en el homenaje de los artistas españoles al poeta Antonio Machado y en la III Bienal  que se celebra en el 1955 en Barcelona. En 1956 participa en el VII Salón de los jóvenes pintores en el Museo de Arte Moderno y le conceden la medalla de la Villa de París. Su labor como tallista ha sido comentada por diferentes escritores y artistas encargándole Picasso algunos marcos. Viaja también por toda Francia trabajando en diferentes catedrales.


Alcaraz regresa a España en 1963. Desde 1963 a 1967, Alcaraz trabaja en el Casón del Buen Retiro y en los inicios del Instituto Central de restauración contratado por la Dirección General de Bellas Artes como técnico de escultura, pintura y objetos arqueológicos en su taller de restauración.


En el 68 se inaugura en la sala Goya del Círculo de Bellas Artes la exposición 'El marco en el arte' con cuadros del siglo XVII al XX enmarcados por el pintor. En 1969 después de muchos años sin exponer en Almería expone en la Biblioteca Francisco Villaespesa. En 1973 vuelve a exponer en el Círculo de Bellas Artes con una colectiva de 25 pintores contemporáneos.

Desde finales de los años 60 había encontrado en la Sierra Noroeste de la provincia de Segovia un lugar de descanso, sin dejar el estudio madrileño. En 1975 expone en la galería Parriego en Almería. Por encargo de la Asociación de Amigos de la Catedral de Almería inicia en 1975 la restauración de la Inmaculada de Murillo y dos tablas, un Ecce Homo y un Anunciación atribuida a Machuca.

En 1982 se celebra otra muestra colectiva en Madrid con Luis Cañadas con el que mantenía una gran amistad. En el 85 tiene lugar la celebración del 40 aniversario del grupo indaliano en la galería Argar. Está vinculado al Café Gijón ayudando a las labores de restauración del viejo café. En 1987 la Galería Argar organiza una exposición antológica. En 1988 en la tertulia 'Contra aquello y esto' del Café Gijón se celebra el homenaje a Alcaraz, sin duda uno de sus más comprometidos y fieles tertulianos.

Por encargo de los Padres Escolapios de Madrid restaura entre el 90 y 95 un cuadro del Greco, la oración del huerto y otro de Ribera San Jacobo el menor. En 1996 se celebra la segunda Exposición Antológica del Movimiento Indaliano conmemorando el 50 aniversario.

Ha estado muy vinculado al pueblo cordobés de Villa del Río. localidad natal de su amigo Pedro Bueno y el que la pintora Beppo pasó largas temporadas.

En Garganta de los Montes, un pequeño pueblo de la sierra madrileña vivía Alcaraz, en plena naturaleza, de donde es hijo predilecto.

Siguiendo sus deseos, sus hijos procederán a depositar sus cenizas en Almería.