La peña La Temporera, con la colaboración de la Asociación de Artistas Flamencos de Córdoba y el Ayuntamiento de la localidad, organizó el lunes en la caseta municipal un evento con solera. Un público entendido supo aplaudir a unos artistas de primer nivel.
08/10/2003
El pasado lunes, con motivo de las fiestas en honor de la Virgen del Rosario, se celebró en la caseta municipal de Almodóvar un destacado festival flamenco, organizado por la peña flamenca La Temporera, con la colaboración de la Asociación de Artistas Flamencos de Córdoba y el patrocinio del Ayuntamiento
de la localidad, que preside Mari Sierra Luque, presente durante todo el espectáculo, acompañada por los cinco presidentes que han pasado por la peña organizadora desde su fundación en el año 1993: Antonio Muñoz Prieto, José Jiménez Mata, Antonio Gil Siles, Francisco García Serrano e Ignacio
Jiménez Mata.
Un lleno total en la caseta ferial, con la asistencia de numerosos aficionados locales, peñas desplazadas desde otros lugares, como El Rincón del Cante y El Aljibe de Carcabuey, y personas relacionadas con el flamenco, como Paco Ruiz, presidente de honor permanente de la peña flamenca El Rincón del Cante y el presidente de la Asociación de Artistas Flamencos de Córdoba.
El acto fue presentado por Paco Pérez, de Onda Cero, demostrando una vez más el cumplimiento en sus funciones como coordinador, conocimiento de los cantes, las interpretaciones e historial de cada uno de los artistas que actuaron.
NOCHE DE APLAUSOS
En primer lugar actuó la guapa cordobesa Remedios Castro, cuya destacada belleza le hizo ser Reina de la Federación de Peñas, una gran voz de la canción española hoy dedicada al flamenco, cada día con más soltura, que acompañada a la guitarra por José Antonio Díaz, una de las más movidas durante el pasado verano, cantó soleá de Cádiz, alegría, tientos tangos y fandangos, con una buena ejecución que le hizo ganarse los primeros aplausos de la noche.
El segundo artista en escena fue Joaquín Garrido, acompañado a la guitarra del maestro Rafael Trenas, un cantaor nacido en Córdoba, ya muchos años viviendo en Villa del Río, al que hemos tenido el placer de escucharlo en sus mejores momentos, tanto en Córdoba como fuera de ella, pues no olvidamos
el viaje que hicimos juntos al musical pueblo de Alfafar en Valencia hace más de 20 años, donde dejó con sus cantes bien alto el pabellón cordobés, y que ahora nuevamente, tras una baja en actuaciones, vuelve con esa gran voz y fuerza flamenca como el lunes demostró en los cantes por mirabrás, soleá, levante, tarantos y fandangos, donde sobresalió en el primer cante y en los últimos, que calaron de forma impresionante entre los asistentes.
En un festival de esta envergadura no podía faltar el baile de una joven cordobesa como Cristina Angulo, que demostró su gran hechura flamenca, acompañada por un cuadro de lujo compuesto por El Canijo al cajón, Víctor Márquez a la guitarra y el gran cantaor El Güeñi, que hicieron destacar aún más la valía de la bailaora, que se lució por alegría rematando por soleá.
La siguiente artista, Anabel Castillo, es otra cantaora que se inició con la copla, integrada hace unos años en el flamenco, donde además de su enorme simpatía y saber estar en el escenario, paso a paso se está convirtiendo en nuestra mayor embajadora de la mujer flamenca cordobesa fuera de nuestras
fronteras, como demostró en sus cantes por granaína y media, tangos, colombianas y fandangos, rematando su gran actuación, en la que estuvo acompañada a la guitarra por José Antonio Díaz, con baile.
Por último, pudimos disfrutar del cantaor Cancanilla de Marbella, cuyo arte le ha convertido en una de las primeras figuras actuales del flamenco. En Almodóvar cantó --con ese empeño que siempre pone para agradar a la concurrencia-- acompañado de la gran sonora guitarra de Rafael Trenas por
seguiriyas, tientos tangos, soleá, fandangos, malagueñas y bulerías, para pasar al fin de fiesta donde Cancanilla demostró sus grandes dotes en el baile, junto a la joven bailaora, acompañados por los artistas participantes entre una gran ovación.
08/10/2003
El pasado lunes, con motivo de las fiestas en honor de la Virgen del Rosario, se celebró en la caseta municipal de Almodóvar un destacado festival flamenco, organizado por la peña flamenca La Temporera, con la colaboración de la Asociación de Artistas Flamencos de Córdoba y el patrocinio del Ayuntamiento
de la localidad, que preside Mari Sierra Luque, presente durante todo el espectáculo, acompañada por los cinco presidentes que han pasado por la peña organizadora desde su fundación en el año 1993: Antonio Muñoz Prieto, José Jiménez Mata, Antonio Gil Siles, Francisco García Serrano e Ignacio
Jiménez Mata.
Un lleno total en la caseta ferial, con la asistencia de numerosos aficionados locales, peñas desplazadas desde otros lugares, como El Rincón del Cante y El Aljibe de Carcabuey, y personas relacionadas con el flamenco, como Paco Ruiz, presidente de honor permanente de la peña flamenca El Rincón del Cante y el presidente de la Asociación de Artistas Flamencos de Córdoba.
El acto fue presentado por Paco Pérez, de Onda Cero, demostrando una vez más el cumplimiento en sus funciones como coordinador, conocimiento de los cantes, las interpretaciones e historial de cada uno de los artistas que actuaron.
NOCHE DE APLAUSOS
En primer lugar actuó la guapa cordobesa Remedios Castro, cuya destacada belleza le hizo ser Reina de la Federación de Peñas, una gran voz de la canción española hoy dedicada al flamenco, cada día con más soltura, que acompañada a la guitarra por José Antonio Díaz, una de las más movidas durante el pasado verano, cantó soleá de Cádiz, alegría, tientos tangos y fandangos, con una buena ejecución que le hizo ganarse los primeros aplausos de la noche.
El segundo artista en escena fue Joaquín Garrido, acompañado a la guitarra del maestro Rafael Trenas, un cantaor nacido en Córdoba, ya muchos años viviendo en Villa del Río, al que hemos tenido el placer de escucharlo en sus mejores momentos, tanto en Córdoba como fuera de ella, pues no olvidamos
el viaje que hicimos juntos al musical pueblo de Alfafar en Valencia hace más de 20 años, donde dejó con sus cantes bien alto el pabellón cordobés, y que ahora nuevamente, tras una baja en actuaciones, vuelve con esa gran voz y fuerza flamenca como el lunes demostró en los cantes por mirabrás, soleá, levante, tarantos y fandangos, donde sobresalió en el primer cante y en los últimos, que calaron de forma impresionante entre los asistentes.
En un festival de esta envergadura no podía faltar el baile de una joven cordobesa como Cristina Angulo, que demostró su gran hechura flamenca, acompañada por un cuadro de lujo compuesto por El Canijo al cajón, Víctor Márquez a la guitarra y el gran cantaor El Güeñi, que hicieron destacar aún más la valía de la bailaora, que se lució por alegría rematando por soleá.
La siguiente artista, Anabel Castillo, es otra cantaora que se inició con la copla, integrada hace unos años en el flamenco, donde además de su enorme simpatía y saber estar en el escenario, paso a paso se está convirtiendo en nuestra mayor embajadora de la mujer flamenca cordobesa fuera de nuestras
fronteras, como demostró en sus cantes por granaína y media, tangos, colombianas y fandangos, rematando su gran actuación, en la que estuvo acompañada a la guitarra por José Antonio Díaz, con baile.
Por último, pudimos disfrutar del cantaor Cancanilla de Marbella, cuyo arte le ha convertido en una de las primeras figuras actuales del flamenco. En Almodóvar cantó --con ese empeño que siempre pone para agradar a la concurrencia-- acompañado de la gran sonora guitarra de Rafael Trenas por
seguiriyas, tientos tangos, soleá, fandangos, malagueñas y bulerías, para pasar al fin de fiesta donde Cancanilla demostró sus grandes dotes en el baile, junto a la joven bailaora, acompañados por los artistas participantes entre una gran ovación.
