La Unidad de Nutrición del Hospital Alto Guadalquivir, de Andújar, ha
atendido a 379 pacientes en 2008, entre los ingresados y los
ambulatorios, tanto con el seguimiento de éstos en Hospitalización
como en la consulta de Nutrición y de Enfermería, respectivamente.
Esta Unidad se creó en 2008 para dar cumplimiento al Proceso diseñado
por la Consejería de Salud de Soporte de Nutrición Clínica y
Dietética, que aglutina el trabajo hospitalario con el desarrollado en
Atención Primaria, ofreciendo una atención integral al paciente en
ambos niveles asistenciales. Para ello, establece un sistema de
prevención, detección precoz, asistencia y control de la malnutrición
en la población hospitalizada y de Atención Primaria.
Esta Unidad está compuesta por una facultativa especialista en
Medicina Interna y una enfermera, las cuales realizan la valoración
inicial y seguimiento de pacientes hospitalizados, además de llevar a
cabo una consulta semanal de Nutrición con pacientes ambulatorios
procedentes de Atención Primaria, y una mensual para su seguimiento de
enfermería.
Dentro de estas intervenciones, han sido 28 los pacientes
hospitalizados a los que se ha realizado la valoración, la indicación
de tratamiento y el seguimiento en función de su diagnóstico
nutricional, recomendaciones al alta y seguimiento posterior en
consulta. Asimismo, en la consulta de Nutrición, se han atendido 219
pacientes y en la de enfermería, 132. El perfil de los pacientes son
personas malnutridas o con riesgo de malnutrición, así como pacientes
con obesidad y alguna patología asociada.
Satisfacción
El pasado mes de junio, los componentes de la Unidad de Nutrición
realizaron un grupo focal con usuarios que han recibido atención en
esta Unidad, destacando un alto grado de satisfacción tanto por la
accesibilidad a la consulta, la confortabilidad de la misma y, sobre
todo, el trato y la información ofrecida por los profesionales.
Los usuarios destacaron como base fundamental la continuidad y
vigilancia que realiza enfermería en la ayuda al cumplimiento del
régimen terapéutico, mantenimiento y conocimiento de las pautas
alimenticias, así como a conseguir los objetivos individuales.
Igualmente, consideraron esencial en su proceso la motivación que
reciben de su enfermera para continuar en el proceso.