Cuando en una obra de arte, el paso del tiempo, cubre la belleza original de una imagen tan hermosa y valiosa, como las que nos ocupa ahora; los artistas y científicos ponen todos sus conocimientos al servicio de un arte casi desconocido: La Restauración.
El villarrense Sebastian Montes Carpio, no sólo es un artista consolidado y con importantes obras que han salido de sus manos, sino que el arte de la restauración, ese de ganarle al tiempo, lo que el tiempo oculta en las obras de arte; es, en Sebatian, una disciplina que una vez más domina a la perfección. En esta ocasión ha logrado ese milagro con la imagen de Ntra. Sra. de las Agustias, titular de la Hdad. de la Santa Cruz.
La imagen es la más antigua que se conserva en nuestro municipio. Pertenece al tipo de obras denominadas de candelero para vestir, siendo su tamaño inferior al natural. Se halla catalogada como pieza de autoría anónima, tallada a finales del siglo XVII. Presenta una posición implorante, con las manos extendidas y la apenada mirada dirigida hacia el cielo. En su estación de penitencia se muestra en Soledad ante la Santa Cruz.
Las principales patologías que presentaba eran debidas al paso del tiempo y alguna desafortunada intervención anterior. En cuanto a las partes anatomizadas y policromadas, existían varias fisuras, producidas por los movimientos de la madera. También mostraba numerosas pérdidas de pequeñas partículas de policromía, además de un desgaste de color debido a las numerosas intervenciones de limpieza, así como una dureza de sus carnaciones provocada por la aplicación de una pátina muy oscura que fue introducida en todas las superficies internas del rostro. En cuanto a los postizos, no conservaba las lágrimas ni las pestañas que originalmente tenía. El resto del cuerpo se encontraba también en mal estado, con numerosas fisuras y grietas debidas a objetos metálicos.
La restauración ha consistido en la retirada de todos los objetos metálicos; tras esto, se ha saneando la madera desde el interior y consolidado la estructura interna de la pieza. En lo que respecta a las partes anatomizadas, se ha procedido a una limpieza exhaustiva, eliminando repintes y el polvo y la suciedad adherida por el paso del tiempo. Una vez saneadas las fisuras, se han reintegrado todas aquellas partes que habían perdido partículas de policromía, así como las pestañas y las lágrimas. Los brazos y el candelero han sido sustituidos por otros de nueva factura.
En cuanto a la autoría de la imagen, si bien desde la hermandad, como hemos apuntado, se tiene como obra anónima de finales del siglo XVII, aunque no exista documento alguno que lo acredite, todo parece indicar que su ejecución es bastante posterior. En opinión de Sebastián Montes Carpio, se acerca a las tallas decimonónicas pertenecientes al círculo de seguidores del escultor e imaginero archidonés Juan de Astorga Cubero.
La imagen se encuentra ya restaurada en Villa del Río y será presentada el próximo 15 de agosto en una solemne eucaristía que tendrá lugar en la capilla de Jesús Nazareno a cargo de Don Manuel Tirado Fernández, así mismo la imagen quedará expuesta al rezo de los fieles durante toda la noche. La imagen al igual que en este reportaje de restauración será ataviada para este importante día por el bordador y vestidor cordobés Don Antonio Villar Moreno.
Fuente: http://www.lahornacina.com/