La compañía eléctrica espera el juicio contra el timador de enganches de la luz
07/03/2009 (Diario Cordoba)
El pasado mes de enero, la Policía Nacional detuvo a un hombre de 52 años que presuntamente se hacía pasar por instalador oficial para enganchar viviendas irregulares a la red eléctrica. El caso, que está en manos de la Fiscalía, será juzgado próximamente y Endesa podrá reclamar también una compensación a los propietarios de las viviendas que han disfrutado de energía eléctrica sin contratar el servicio. De forma paralela, el Ayuntamiento debe cursar los preceptivos expedientes sancionadores administrativos, que actuarán tanto contra el técnico que supuestamente realizó los enganches irregulares como contra los "promotores", es decir, los propietarios que se hayan beneficiado de este servicio.
Según informó ayer el director territorial de Sevillana, los enganches ilegales se habrían producido en la zona de Trassierra, en la Campiña y hasta en Villa del Río. El ´modus operandi´ consistía en cobrar a los propietarios entre 1.500 y 3.000 euros por poner el contador, pero dejando que la vivienda se alimentase gratuitamente de la electricidad desde ese momento sin pago alguno a Endesa.
07/03/2009 (Diario Cordoba)
El pasado mes de enero, la Policía Nacional detuvo a un hombre de 52 años que presuntamente se hacía pasar por instalador oficial para enganchar viviendas irregulares a la red eléctrica. El caso, que está en manos de la Fiscalía, será juzgado próximamente y Endesa podrá reclamar también una compensación a los propietarios de las viviendas que han disfrutado de energía eléctrica sin contratar el servicio. De forma paralela, el Ayuntamiento debe cursar los preceptivos expedientes sancionadores administrativos, que actuarán tanto contra el técnico que supuestamente realizó los enganches irregulares como contra los "promotores", es decir, los propietarios que se hayan beneficiado de este servicio.
Según informó ayer el director territorial de Sevillana, los enganches ilegales se habrían producido en la zona de Trassierra, en la Campiña y hasta en Villa del Río. El ´modus operandi´ consistía en cobrar a los propietarios entre 1.500 y 3.000 euros por poner el contador, pero dejando que la vivienda se alimentase gratuitamente de la electricidad desde ese momento sin pago alguno a Endesa.