miércoles, 16 de noviembre de 2011
VILLA DEL RÍO UN NIÑO DE CUATRO AÑOS NO ASISTE AL COLEGIO
"Me da miedo dejar a Aarón en el colegio sin un enfermero al lado"
La madre se niega a formar otros cuatro meses al nuevo monitor de la Junta "sin saber si seguirá o no"
RAFAEL C. MENDOZA | ACTUALIZADO 16.11.2011 - 05:01 EL DIA DE CORDOBA
Aarón, un niño de cuatro años de Villa del Río que sufre una grave y rara enfermedad, junto a su madre y su abuela.
Los padres de Aarón, el niño de cuatro años de Villa del Río que sufre una grave y rara enfermedad rara -ni siquiera los médicos la han etiquetado aún según señala su madre, Susana Sánchez- y que no acude al colegio al afirmar sus progenitores que carece de atención sanitaria cualificada, viven un auténtico calvario desde el pasado septiembre. Sus problemas neuromusculares y el aparataje que ha de llevar consigo le impiden comer y orinar, ni siquiera puede sonarse los mocos él solo, pero sí relacionarse con los demás. Disfruta como el que más cuando está rodeado de otros niños y sonríe con cada una de esas ocurrencias infantiles que se repiten por docenas en la escuela. Sin embargo, no puede participar en las rutinas de los escolares porque, en términos de su madre, en el centro en el que la Junta le asignó una plaza "no tiene personal sanitario cualificado que lo atienda correctamente".
Aarón sólo ha pasado este curso unas horas en el aula de Infantil del colegio Poeta Molleja, el tiempo que tardaron sus padres en comprobar que Educación había sustituido al monitor que ellos mismos se habían encargado de formar "durante cuatro meses". Desde entonces, el menor no ha vuelto a pisar su clase. Pasa cada mañana entre las cuatro paredes de su casa junto a su abuela mientras sus padres acuden a sus puestos de trabajo y los días que no llueve él y su abuela salen a dar una vuelta por el pueblo. Él, en su silla de ruedas eléctrica, y ella pendiente en todo momento de cualquier complicación que pueda surgir. Aarón tiene una traqueotomía, una gastrostomía y se vale de un sistema de ventilación mecánica para sobrevivir. "No puede quedarse en manos de quien no conoce estos sistemas", afirma Susana, quien añade que "me da miedo dejarlo en el colegio sin un enfermero al lado".
La madre echa la vista atrás para explicar la magnitud del problema que, admite, sobrellevan con todo el cariño del mundo. Aarón nació con esta patología y los médicos que lo asistieron no permitieron a sus padres que se lo llevarán a casa hasta que no los vieron totalmente preparados para ello. "Transcurrieron seis meses desde que nació hasta que Aarón llegó a casa", destaca la madre del menor. Son todas estas cautelas, además de los informes médicos con los que cuenta la familia Torralbo Sánchez, los que les han llevado a emprender una lucha contra la Junta de Andalucía, a la que culpan de no dotar al colegio del personal "cualificado" para que acompañe a su hijo desde que entra hasta que sale del colegio.
Sólo un acto "de buena voluntad" por parte de sus progenitores permitió que Aarón pudiera asistir al colegio durante el pasado curso. La abuela iba cada día al centro para que el monitor contratado por la Junta -a través de un convenio con la federación Fepamic- aprendiera a manejar los sistemas que requiere el niño. "Pensábamos que lo mejor era un enfermero, pero como vimos que no podía ser nos conformamos y colaboramos todo lo que estuvo en nuestra mano para que nuestro hijo pudiera ir al colegio", declara Susana. Sin embargo, expone ella misma, "el sueldo precario, de 600 euros al mes", que recibía el monitor, un auxiliar de enfermería, "le llevó a renunciar a este puesto de trabajo para buscarse un empleo más rentable". Fue entonces cuando esta familia regresó al punto de partida, esa especie de túnel de salida "complicada".
A pesar de reconocer que se encuentra en un callejón sin salida, la madre de Aarón precisa que hay soluciones. "Planteé la posibilidad de que fuera mi madre la que de forma gratuita se quedara en el colegio con el niño, pero no pudo ser", destaca. Al analizar la opción de formar al nuevo auxiliar puntualiza que "no vamos a volver a hacerlo si no nos dan la seguridad de que va a seguir más años con nuestro hijo".
Desde Educación sostienen, sin embargo, que los recursos de los que dispone el colegio de Villa del Río para atender a Aarón son "suficientes" y se niegan a contratar a un enfermero como pide la familia.